Frecuentemente damos por hecho que nuestras costumbres son preferibles a otras y por tanto consideramos que son estas tradiciones propias las que mejor se adaptan a la realidad.
Esta
circunstancia propia de comunidades encerradas en sí mismas no es nueva pues ya
la señalaron hace tiempo los
antropólogos, abundando en el criterio que viene
a significar una simplísima perspectiva de las sociedades que nos rodean, esta
perspectiva la podríamos denominar etnocéntrica.
Viajar
permite descubrir otros modelos de vivir y ser conscientes de que lo que
entendemos como normal es casi siempre
producto de un determinado contexto cultural, sin que este sea más propicio que
otro cualquiera.
La
conclusión es clara: es beneficioso e incluso necesario viajar.
Viajar significa buscar y disfrutar con las creaciones en las que la humanidad se apoya para progresar. Se hace necesario deleitarse con una escultura, unas ruinas, una pintura, una obra arquitectónica, obras en suma que han marcado una civilización, una cultura y también una época.
Como esta búsqueda no mueve a disfrutar con las grandes creaciones de la humanidad, desde esta Asociación se intenta promover visitas culturales que permitan facilitar a sus asociados este recomendado encuentro entre culturas.
Por eso, este año y como complemento necesario
a la conferencia impartida en días pasados por D. Jorge Moreno, “El uso de la
piedra en los Pedroches” hemos visitado,
aprovechando el puente de San Gregorio, las comarcas del El Bierzo y La Maragatería
en la provincia de León.
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